La dramatización supone un ámbitoherramienta educativa que presenta una inmensidad de posibilidades en el desarrollo del currículum escolar. El uso de la dramatización está más orientada a la preparación de una obra teatral para la representación escolar, que al desarrollo de la creatividad y la relación con los demás en el niño. Por ello, y porque la dramatización genera un espacio idóneo para un aprendizaje creativo y significativo de valores y habilidades sociales, justificamos teóricamente la necesidad de aplicar la dramatización en la escuela.
La dramatización es una realidad educativa con una triple aportación al currículum escolar:
a) Educación en valores y en habilidades sociales.
b) Habilidades expresivas, creativas y comunicativas, en diferentes áreas.
c) Habilidades artísticas.
d) El drama posee un factor motivacional para el aprendizaje, por su carácter lúdico y global.
E) Existe una doble concepción del uso de la dramatización en España: como ámbito propio
dentro del área Artística (LOGSE) y como herramienta para el desarrollo de otras áreas curriculares (LOCE). En la corriente anglosajona se integran ambas perspectivas.
F) Existe un abandono por parte del Ministerio de Educación y Ciencia y de las Universidades en velar por favorecer la formación del profesorado, de forma que la legislación educativa existente sobre dramatización en Educación Primaria pueda ser llevada a la práctica.
G) Se manifiesta con rotundidad la necesidad y la importancia de la formación previa del profesor, puesto que el drama posee un lenguaje y una metodología propios que hay que
conocer; se requieren además unas habilidades pedagógicas específicas.
H) Nuestra propuesta de formación se centra en un perfil profesional con una formación
en arte y educación, con una clara preocupación y trayectoria pedagógica. Apostamos por un modelo de maestro generalista en Primaria que domine la dramatización.
I) La formación pedagógica del futuro maestro debe contener:
1) Reflexión axiológica sobre los objetivos de la educación.
2) Conocimiento del desarrollo evolutivo del niño en relación con el trabajo dramático.
3) Conocimiento, teórico y práctico, de métodos de trabajo con niños.
4) Y, finalmente, desarrollo de habilidades pedagógicas: planificación, control del tiempo, estructuración de las sesiones, implicación, atención a los procesos personal y de grupo, revisión
y evaluación.
5) La formación artística debe contener la alfabetización del lenguaje dramático, que supone el
dominio de técnicas como los roles teatrales, el cuerpo, la voz, el espacio y el tiempo.
6) Abogamos por una metodología basada en el aprendizaje vivencial, que supera el
aprendizaje experiencial, en cuanto que reflexiona y generaliza la experiencia.
7) Finalmente, este aprendizaje ha de contener:
- Explicaciones teóricas y lecturas que aclaren la teoría, así como conocimiento bibliográfico de fuentes.
- Experimentación de la teoría, los juegos y las sesiones de dramatización guiadas por el profesor.
- Dirección de clases de drama tutorizadas y revisadas por el profesor.
- Relación directa con los niños en sus propios contextos educativos para hacer drama.
- Revisión del trabajo realizado.
La dramatización es una realidad educativa con una triple aportación al currículum escolar:
a) Educación en valores y en habilidades sociales.
b) Habilidades expresivas, creativas y comunicativas, en diferentes áreas.
c) Habilidades artísticas.
d) El drama posee un factor motivacional para el aprendizaje, por su carácter lúdico y global.
E) Existe una doble concepción del uso de la dramatización en España: como ámbito propio
dentro del área Artística (LOGSE) y como herramienta para el desarrollo de otras áreas curriculares (LOCE). En la corriente anglosajona se integran ambas perspectivas.
F) Existe un abandono por parte del Ministerio de Educación y Ciencia y de las Universidades en velar por favorecer la formación del profesorado, de forma que la legislación educativa existente sobre dramatización en Educación Primaria pueda ser llevada a la práctica.
G) Se manifiesta con rotundidad la necesidad y la importancia de la formación previa del profesor, puesto que el drama posee un lenguaje y una metodología propios que hay que
conocer; se requieren además unas habilidades pedagógicas específicas.
H) Nuestra propuesta de formación se centra en un perfil profesional con una formación
en arte y educación, con una clara preocupación y trayectoria pedagógica. Apostamos por un modelo de maestro generalista en Primaria que domine la dramatización.
I) La formación pedagógica del futuro maestro debe contener:
1) Reflexión axiológica sobre los objetivos de la educación.
2) Conocimiento del desarrollo evolutivo del niño en relación con el trabajo dramático.
3) Conocimiento, teórico y práctico, de métodos de trabajo con niños.
4) Y, finalmente, desarrollo de habilidades pedagógicas: planificación, control del tiempo, estructuración de las sesiones, implicación, atención a los procesos personal y de grupo, revisión
y evaluación.
5) La formación artística debe contener la alfabetización del lenguaje dramático, que supone el
dominio de técnicas como los roles teatrales, el cuerpo, la voz, el espacio y el tiempo.
6) Abogamos por una metodología basada en el aprendizaje vivencial, que supera el
aprendizaje experiencial, en cuanto que reflexiona y generaliza la experiencia.
7) Finalmente, este aprendizaje ha de contener:
- Explicaciones teóricas y lecturas que aclaren la teoría, así como conocimiento bibliográfico de fuentes.
- Experimentación de la teoría, los juegos y las sesiones de dramatización guiadas por el profesor.
- Dirección de clases de drama tutorizadas y revisadas por el profesor.
- Relación directa con los niños en sus propios contextos educativos para hacer drama.
- Revisión del trabajo realizado.
1 comentario:
Muy bien. La entrada me gusta mucho. La vemos en clase.
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